Pintan un mural callejero en Massanassa sobre la lucha de la mujer por sus derechos

Tras varias semanas de trabajo, Massanassa cuenta con un nuevo mural que rehabilita una de las calles más degradadas de la población y que «difunde valores transformadores mediante el arte y la belleza», según señalan desde Sí Se Puede-Podemos Massanassa.

Toda la calle de Braç del Mitjà, frente a la farmacia de la avenida Blasco Ibáñez, ha sido pintada por artistas del pueblo y de Valencia, por empresas colaboradoras y por voluntariado de Si Se Puede-Podemos Massanassa. Muchos vecinos además se han animado a pintar las fachadas de sus casas y garajes.

Durante todo un fin de semana, artistas con pinceles y grafitis realizaron imágenes relacionadas con la lucha de la mujer por sus derechos, con creaciones alrededor de los 100 años del nacimiento de la poetisa Gloria Fuertes, con creaciones sobre la artista Frida Khalo, con símbolos sobre la nueva mujer y los retos actuales del feminismo.

Los murales se han desarrollado dentro del proyecto + ART que busca mejorar las calles más degradadas del pueblo. Este es el segundo mural, tras el realizado en la calle Germanies sobre la memoria y la historia del pueblo.

Este mural ha sido organizado y financiado por la concejalía de Sí Se Puede-Podemos en el ayuntamiento, el pub Mandala, la empresa estilo mural y artistas de Valencia y de Massanassa. Con el patrocinio de las empresas MONTO, JAG, BLATEM Y LIQUITEX.

Y con la participación de las artistas Beatriz Adela, Laura Castelló, Jotaone, Exit, Beatriz Rodriguez, Juan José Alba raga, Jhon sun rising, Napol, Home, Medio, Adriano y Visa Knowing-

Para Sí Se Puede Podemos-Massanassa, «toca reivindicar que, con voluntad, trabajo en equipo, diálogo y creatividad las cosas pueden cambiarse, y que no tenemos por qué resignarnos a vivir en calles degradadas y llenas de excrementos de perros, sucias. Toca reivindicar que agrupándonos somos más y que podemos lograr cosas inimaginables hasta hace poco y que, mientras al Ayuntamiento de Massanassa le cuesta tanto mantener las calles y jardines de este pueblo con un mínimo de higiene, si los vecinos y las organizaciones sociales se organizan, pueden dar un vuelco a su entorno más cercano».

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