Compromís acusa al gobierno socialista de Mislata de «despreciar» al Síndic de Greuges

Compromís ha señalado que el Ayuntamiento de Mislata ha dejado pasar el plazo de tiempo que tenía para contestar si aceptaba la sugerencia del Síndic de Greuges de la Comunitat Valenciana, que recomendaba al gobierno municipal del PSOE que estudie con la oposición la modificación de su reglamento en aquello que se refiere al turno de palabras en los plenos, “a fin de que estos límites no comporten una vulneración de los derechos fundamentales en el ejercicio del cargo público y de participación en los asuntos públicos”.

Ante esta falta de respuesta, el Síndic de Greuges ha realizado un nuevo requerimiento al Ayuntamiento de Mislata, puesto que “no ha contestado de manera expresa dentro del plazo máximo de un mes, tal como es preceptivo, según la Ley 11/1988 del Síndic de Greuges». Y lo insta a contestar»en un plazo máximo de 15 días si acepta o no la resolución”.

Esta resolución del Síndic de Greuges fue fruto de la queja interpuesta por Compromís per Mislata el pasado mes de noviembre, en la cual se manifestaba que la limitación temporal y de número en el turno de ruegos y preguntas hacía complicada la tarea de control al gobierno por parte de la oposición.

El concejal y portavoz de Compromís per Mislata, Javier Gil, lamenta “que el gobierno de Bielsa desprecie una institución tan importante como el Síndic de Greuges», y espera que «aproveche esta segunda oportunidad que le dan para aceptar la sugerencia y empezar un diálogo con la oposición”.

“Esperamos que el municipio de Mislata no aparezca en el informe anual que el Síndic de Greuges presenta a Les Corts por no cumplir con los plazos que marca la ley y la sugerencia planteada por el Síndic”, ha concluido Gil.

Negociación

Por su parte, el gobierno municipal, a través de su portavoz, Mª Luisa Martínez, acusa a Compromís de «la manipulación del informe para atacar al gobierno socialista». Martínez afirma que el informe del Síndic de Greuges «no habla de ninguna vulneración de derechos, más bien al contrario», aunque reconoce que «lo único que recomienda es un acuerdo entre grupos políticos si se quiere cambiar el tiempo destinado a los ruegos y preguntas» en los plenos. En este sentido, la portavoz muestra su disposición «a negociar cualquier aspecto del Reglamento Orgánico Municipal», pero añade que «cuando corresponda, no cuando interese políticamente», y advierte al portavoz de Compromís que «las mentiras y las falsas acusaciones no son la mejor manera de iniciar un diálogo para llegar a acuerdos».

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