Los menores de 14 años podrán acompañar a adultos al súper, farmacias y bancos
Madrid, 21 abr (EFE).- La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha avanzado este martes que los menores de catorce años podrán a partir del 27 de abril acompañar a un adulto en las actividades que ya permite el estado de alarma, como ir al supermercado, a la farmacia o al banco.
Se trata de un alivio parcial del confinamiento, según Montero, que ha advertido, no obstante, que la prioridad del Gobierno es evitar un hipotético retroceso en el avance del virus.
La medida, incluida en una nueva prórroga del estado de alarma que el Gobierno solicitará este miércoles al Congreso, afecta a 6,8 millones de menores de esa edad en todo el país.
Los niños están confinados en sus casas desde que el pasado 14 de marzo el Gobierno decretó el estado de alarma, que reduce la movilidad de los adultos a la realización de compras de primera necesidad o para ir a los trabajos esenciales, con el fin de frenar la propagación de la pandemia de coronavirus.
A partir del próximo lunes, los menores podrán acompañar a un adulto con el que conviva en las actividades que permite el confinamiento, es decir, a realizar compras de alimentos o productos básicos e ir a la farmacia o al banco.
Esto supone «un alivio» del confinamiento, ha afirmado este martes la portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quien ha insistido en que la prioridad es «evitar un hipotético retroceso» en la lucha contra la pandemia, que está bajando en los últimos días.
La ministra ha insistido en que las salidas deben ser «controladas» y «cumpliendo de manera escrupulosa» las medidas de higiene y distanciamiento social que están frenando la expansión de la pandemia, que ha causado ya 204.178 contagios en España y se ha cobrado 21.282 vidas.
Esta medida de flexibilización del confinamiento para los niños se ha hecho «siguiendo las recomendaciones de los expertos y ponderando el riesgo y beneficio», ha recalcado Montero.
Era una demanda de pediatras y asociaciones de padres, que en los últimos días insistieron en el impacto psicológico negativo que un encierro prolongado puede provocar en los más pequeños, generando multitud de trastornos, como la obesidad ante la falta de actividad física, la ansiedad o el nerviosismo.
La iniciativa cobró intensidad en España después de que el Gobierno italiano anunciase hace algunas semanas que permitiría las salidas controladas de los más pequeños.