Cristina Mora, nueva alcaldesa de Quart de Poblet
La socialista ha recogido la vara de mando de manos de Carmen Martínez, quien ha estado al frente del Ayuntamiento 24 años
Cristina Mora es la nueva alcaldesa de Quart de Poblet. La hasta ahora concejal de Cultura durante tres legislaturas ha recogido la vara de mando de su «compañera y amiga» Carmen Martínez, quien ha estado al frente del Ayuntamiento 24 años.
La socialista Cristina Mora ha prometido el cargo combinando el castellano y el valenciano y ha señalado que asume el cargo con «mucha humildad y energía.
Dispuesta a trabajar por todos y cada uno de los vecinos y vecinas que forman este maravilloso pueblo, independientemente de su origen social, su raza, edad e ideología.»
En una corporación en la que por primera vez hay representación de VOX, la alcaldesa ha resaltado que podrá «compartir o no algunas opiniones pero respetará la legitimidad de cualquiera de las fuerzas políticas con representación institucional siempre que no se cuestionen los principios democráticos sobre los que se han construido nuestra democracia: igualdad, justicia social, diversidad y solidaridad».
Durante el pleno de investidura Cristina Mora, quien ha recibido 13 votos a favor de su investidura, ha añadido que «bajo mi mandato, no voy a permitir ni un paso atrás en derechos sociales. Ni un paso atrás en igualdad. Ni un paso atrás en justicia social. En Quart de Poblet no vamos a consentir que ningún menor se quede sin beca de comedor ni de estudios, y vamos a garantizar que el ascensor social siga funcionando y nuestros jóvenes puedan llegar a ser lo que quieran. Perseguiremos con intensidad erradicar esa lacra que es la violencia de género, esa que se ejerce sólo contra las mujeres por el mero hecho de serlo».
En un pleno con muchos momentos emotivos y sin sorpresas, la nueva alcaldesa de Quart de Poblet ha recordado algunas frases de un poema de Eduardo: Galeano: «Este va a ser un gobierno que trabaje por sus gentes, aunque esas gentes sean, a ojos de algunos, los nadies, Los sin nombre, los que no tienen cara, os que no aparecen en la historia. Pues en Quart de Poblet todos y todas somos alguien»