Los acusados por el tiroteo del cementerio de Torrent se enfrentan a 50 años de prisión
Los tres acusados de matar a tiros a dos personas y herir a otra el día de Todos los Santos de 2021 en el cementerio de Torrent serán juzgados a partir del próximo 11 de diciembre por un jurado popular y se enfrentan a penas que rondan los 50 años de prisión.
Según consta en la calificación del fiscal, a la que ha tenido acceso EFE, los procesados son un matrimonio y su hijo, autor material de los disparos, y todos ellos se encuentran en prisión preventiva desde el 3 de marzo de 2022.
Los hechos se produjeron, siempre según el Ministerio Público, alrededor de las 10 horas del 1 de noviembre de 2021, cuando los procesados acudieron al cementerio y coincidieron con varios miembros de una familia con la que se encontraban enemistados por peleas en años anteriores.
Al parecer, el matrimonio de acusados y su hijo iniciaron una discusión verbal y física con el clan rival e incluso les golpearon con sillas y palos.
La acusada (la madre) llevaba oculta en sus ropas una pistola y en un momento de la discusión su marido la cogió para disparar, pero se le cayó al suelo.
La madre la recogió y «con la finalidad de que la utilizase para disparar a los miembros de la otra familia», se la entregó a su hijo, que «sin que le importase lo más mínimo que cerca de él hubiese más gente y el riesgo que para ellos podría suponer, comenzó a efectuar disparos hacia los miembros de la otra familia».
Un miembro de la familia rival fue herido en un muslo y otro falleció al recibir un disparo en el corazón, pero también resultó muerto otro hombre que había acudido a llevar flores a la tumba de su mujer y que recibió un tiro en el abdomen.
Ninguno de los tres procesados tenía licencia de armas, motivo por el cual se enfrentan también a un delito de tenencia ilícita.
Por estos hechos, el fiscal pedirá una condena de 51,5 años de prisión para el autor de los disparos como responsable de dos delitos de asesinato consumado (19 años por cada uno) y otro en grado de tentativa (12 años), más un año y medio por tenencia ilícita de armas.
A los padres el fiscal les considera autores de los mismos delitos y les reclama 45,5 años de prisión (17 por cada asesinato, 10 por el intento y la misma pena por tenencia ilícita de armas). EFE