La Coordinadora de AA.VV. de Mislata solicita al Ayuntamiento que mantenga un comedor social todo el año
La situación límite que viven muchas familias en Mislata se ha disparado desde el año 2009, en que las cifras para beneficios sociales de los presupuestos municipales han sido insuficientes para atender la creciente demanda de ayudas sociales, y alimentos para más de 400 familias necesitadas de lo más elemental y en riesgo de exclusión social. Se han ido cubriendo estas deficiencias, sin llegar a conseguir llegar al 100%, con las aportaciones generosas de organizaciones, sin ánimo de lucro, como Cáritas, Cruz Roja, Asociaciones Vecinales y la solidaridad demostrada de la gente, que complementaron todo aquello, o parte, de lo que el Estado y las Administraciones Públicas deberían atender.
No es nuevo el debate abierto sobre la necesidad de un Comedor Social, o la coordinación de los talleres de formación profesional de cocina, con cuyas prácticas se cubren algunas necesidades alimentarias de familias hoy en día, pues es digno mencionar sobre la escuela de cocina, que está gestionada a través de la Concejalía de Promoción y Empleo del Ayuntamiento de Mislata, y que al frente la misma se encuentra un magnifico profesional Ximo Mancebo, ya que viene entregando diariamente 20 menús a la Parroquia de San Marcos para su distribución rotativa entre las familias. Como quiera que la citada Escuela de Cocina cierra durante los meses de verano, es por lo que la Coordinadora de AA.VV. solicita del Ayuntamiento de Mislata que realice un esfuerzo aún mayor si cabe del que viene desarrollando hasta ahora, y cubra las necesidades alimentarias de esas familias, al igual que han abierto los comedores escolares para que niños pertenecientes a familias sin recursos tengan la alimentación necesaria en épocas de vacaciones escolares, y por lo que este Ayuntamiento ha sido destacado por esa labor solidaria.
No nos cansaremos de nombrar la labor que desarrollan los voluntarios que diariamente se encargan de la recogida de alimentos, tanto en la escuela de cocina como en los supermercados, para su distribución a esas familias.
Desde la Coordinadora de AA.VV. estamos proponiendo alternativas que mejoren la toma de decisiones, junto a quienes conocen de primera mano las necesidades de las personas y las familias, tanto de los profesionales de Servicios Sociales, el voluntariado social, y que junto a las parroquias y Asociaciones, llevan pidiendo presupuesto tras presupuesto un esfuerzo mayor en todas aquellas políticas de calado social.