Dos albalencs participarán en un rally solidario en África con un coche de más de 20 años
El próximo viernes 9 de febrero, dos jóvenes ‘albalencs’ emprenderán, la que probablemente, será una de las mayores aventuras de su vida, que los llevará a recorrer varios países africanos, al volante de un Ford Escort del 98 y por un motivo solidario, que no estará exento de peligros, ya que no contarán con tecnología gps para orientarse por los 2.400 kilómetros de áridos parajes por los que se disputa el UniRaid 2024, del 10 al 18 de febrero.
La concejala de deportes del Ayuntamiento de Albal, Azucena Muñoz, no dudó en abrir las puertas del consistorio desde el primer momento en el que tuvo noticia de la aventura de estos jóvenes vecinos del municipio: «Es emocionante comprobar que nuestra localidad contamos con jóvenes emprendedores que no dudan en recorrer el desierto sin tecnología para llevar material solidario a personas que lo necesitan», la edil añadió que «seguro que, Adrián y Dani, motivarán a otros muchos jóvenes a llevar a cabo acciones como está».
Los dos valientes tienen 24 años y son naturales de Albal, sus nombres son, Adrián Garrido y Dani Física, y ambos son amantes y aficionados al motor, aunque sus ocupaciones principales, no tienen nada que ver con el mundo de las 4 ruedas. Adrián, se dedica a la creación de aplicaciones de realidad virtual y realidad aumentada y Dani, forma parte del departamento IT de un importante centro de datos de Paterna.
El principal objetivo de esta aventura es solidario, ya que los participantes llevarán material, básico y funcional, a los diferentes poblados por los que pasen, y que llevarán en sus vehículos. Para ello, además de las aportaciones personales, los jóvenes, no han dudado en llamar a la puerta de diferentes empresas locales y del Ayuntamiento de Albal, para conseguir el mayor número de material solidario posible.
La prueba a la que se van a enfrentar en este rally solidario de estudiantes consta de un total de 6 etapas que combina conducción por carreteras de montaña, pistas, arena y dunas. Los pilotos y copilotos dormirán 2 noches en un hotel, 5 en campamentos organizados en medio del desierto y una noche, la de la etapa maratón, en un vivac libre rodeados de dunas.
Una carrera que no estará exenta de dificultades, ya que los participantes tendrán que completar las etapas sin la ayuda de la tecnología GPS ni de dispositivos electrónicos, y solo tendrán a su disposición, un roadbook, un mapa y una brújula, a bordo de unos vehículos, que, como condición y particularidad, deben de ser de más de 20 años de antigüedad. Adrián y Dani, llevan muchos meses trabajando en mejorar el Ford Escort del 98 que adquirieron para participar en la prueba, y a pesar de no contar con tecnología, la organización utiliza los últimos avances para garantizar la seguridad de todos los participantes, geolocalizando los vehículos vía satélite para poder asistirlos en caso de accidente o averías.
El rally partirá desde Tánger, cruzará Marruecos por el interior, atravesando el Atlas, donde los participantes harán la entrega del material solidario y escolar en aldeas seleccionadas previamente por la organización, para después poner rumbo al sur, hacia las dunas del Erg Chebbi.
Los participantes tendrán la oportunidad de recorrer el desierto siguiendo las antiguas rutas del París-Dakar, hasta llegar a Marrakech, donde finalizará el recorrido de UNIRAID 2024.
Adrián, conoció este rally solidario a través de su jefe y le trasladó la idea a Dani, que no dudó en expresar su entusiasmo, convirtiéndolo en propuesta de reto: «¿A que no hay… de hacerlo?». Adrián, lo pensó unos segundos, y aceptó la propuesta, estrechando la mano de Dani, que como él afirma, es «uno de mis mejores amigos».
El joven informático y piloto aficionado, comentaba que esta experiencia, «supone un gran reto para nosotros y lo estamos esperando con ansia», además apuntaba que, «saber que voy a vivir esta experiencia con Dani, poniendo a prueba nuestros conocimientos, y ayudando de manera solidaria, nunca imaginé que me fuese a llenar tanto».
En el caso de Dani Física, desde bien pequeño, le ha apasionado el mundo del motor, y a pesar de haber querido siempre dedicarse a ello, decidió convertirlo en su hobby, y por eso no tardó «ni cinco segundos» en aceptar la propuesta de su compañero: «¿Preparar un coche durante casi un año para irnos al Sahara a correr un raid y que además es solidario? ¡Como podría decir que no!»