El TSJCV suspende la orden de cierre de la Sala Repvblicca por el Ayuntamiento de Mislata
El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha suspendido la orden de cierre de la sala Repvublicca, impuesta por el Ayuntamiento de Mislata hace cerca de un año por diversas infracciones administrativas.
El Ayuntamiento de Mislata acordó el 14 de diciembre de 2023 la clausura del local y paralización inmediata de la actividad, tras una inspección realizada el 10 de noviembre por la Policía Autonómica, en la que se levantó acta por falta de licencia, incumplir aforo y no disponer de seguro.
El 31 de diciembre de 2023 y 12 de enero de 2024, la Policía Local de Mislata levantó actas de denuncias por reapertura del local, y el 24 de enero se acordó la ejecución forzosa de la resolución de cierre de forma inmediata, procediendo a la desocupación y precinto de los accesos al inmueble.
Ahora, el TSJCV ha estimado el recurso de apelación interpuesto por la mercantil, que había solicitado la suspensión del acto administrativo que ordenaba la clausura de su local.
El Tribunal entiende que la orden de cierre devino ineficaz el 29 de diciembre de 2023, ya que la Conselleria de Justicia e Interior, que era la Administración competente para incoar el expediente sancionador, no incoó el procedimiento sancionador dentro del plazo de 15 días ni ratificó la medida de cierre.
La sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, no es firme y contra ella cabe recurso de casación ante la Sala Tercera del Tribunal Supremo o, en su caso, ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.
Desde la Sala Repvublicca, han destacado que con esta resolución, se abre el camino para que la sala, que lleva más de 30 años siendo un referente cultural en este país, pueda reanudar su actividad y volver a ofrecer conciertos a los miles de asistentes que se han visto privados de sus eventos desde finales de enero.
Ha señalado que la decisión judicial llega después de una serie de problemas administrativos que afectaron gravemente a la sala, incluyendo la suspensión de más de 100 conciertos, lo que tuvo un impacto directo en más de 500 músicos y más de 50.000 personas que se vieron privadas de disfrutar de sus grupos favoritos.
Según los responsables de Repvblicca y de diversos representantes de la industria musical valenciana y española, esta situación ha vulnerado el derecho de acceso a la cultura de miles de ciudadanos y ha provocado importantes perjuicios económicos tanto para los artistas como para los trabajadores de la sala.
Ha advertido de que el Ayuntamiento de Mislata «se enfrenta ahora a una reclamación por los daños causados a la sala y a los artistas, además de los perjuicios derivados de la cancelación de conciertos». EFE