El nuevo encauzamiento del barranco de Puçol tiene un periodo de recurrencia de más de 200 años
El secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Julià Álvaro, ha visitado las obras de encauzamiento del barranco de Puçol, ejecutadas aguas arriba de la Carretera Nacional 340, lo que supone un lecho de nueva planta de unos 600 m. de longitud, y del Puig hasta su desembocadura en el mar. El secretario autonómico y el director general del Agua, Manuel Aldeguer, han estado acompañados por la corporación municipal de Puçol, presidida por la alcaldesa, Lola Sánchez.
El desvío del barranco ha sido una antigua aspiración de Puçol, ya que su morfología y su trazado han representado tradicionalmente una fuente de problemas ante episodios de lluvia.
La longitud total de la actuación es de aproximadamente seis kilómetros, dos en el barranco de Puçol y cuatro en el barranco del Puig. El presupuesto final es de 18.323.822,94 euros. Las obras han sido proyectadas por un período de recurrencia superior a los 200 años, lo que supone una capacidad de desagüe de 86 m3/sg en el nuevo encauzamiento y de más de 250 m3/sg en el barranco del Puig.
En la elección de las diferentes secciones tipo de la actuación han primado los criterios medioambientales, de manera que en la mayor parte de la canalización se ha construido una sección trapezoidal excavada en el terreno natural y recubierta de geoceldas con tierra vegetal para procurar una vegetación permanente. Solo en casos muy concretos, por condicionantes de servicios afectados o bajo las estructuras existentes se ha recurrido a secciones rectangulares con cemento armado.
Entre los problemas más importantes a resolver hay que destacar las modificaciones de las estructuras de paso existentes, para dotarlas de la capacidad hidráulica necesaria, en especial el paso sobre la autovía V-21, acometido mediante fundamentación profunda basada en puntales de hormigón.
Se han hecho nuevos dos puentes y se ha ampliado el paso existente al camino de Puçol al Puig. Dada la longitud de la actuación han resultado afectados una serie de servicios que ha habido que reponer, destacando el cruce de la acequia de Montcada y el gaseoducto.