La Bussines School de Florida Universitària forma a empresarios de la CEV en prevención de delitos
Prevenir la comisión de delitos, evitar que la empresa pueda ser declarada responsable penalmente, proporcionar imagen de transparencia o mejorar la posición de la empresa ante concursos y licitaciones. Estas son solo algunas de las razones que justifican la implantación de un modelo de compliance penal en la empresa. La Business School de Florida Universitària ha organizado el próximo 17 el mayo un desayuno de trabajo para formar a empresarios de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) en el denominado compliance penal.
El término compliance (o cumplimiento normativo) define la necesidad de establecer las políticas y procedimientos adecuados que garantizan que todos los miembros de una empresa, incluidos sus directivos, empleados y agentes vinculados, cumplen con el marco normativo aplicable. Esta sesión de trabajo forma parte de un ciclo de conferencias, en el marco del programa executive en compliance penal.
Carlos Castresana, director del departamento de Derecho Penal EJASO ETL Global y Fiscal de la Sección Penal del Tribunal Supremo en excedencia y Esther Rovira, directora de Consultoría de FIDES CONSULTORES Y ABOGADOS, han impartido la primera sesión de trabajo en ValenciaLAB, el laboratorio de innovación de Florida Universitària. Más de 70 profesionales de diferentes ámbitos del mundo de la empresa han asistido a la jornada en la que se han mostrado las claves para prevenir la comisión de delitos en las empresas y evitar la responsabilidad penal de las personas jurídicas.
Durante su exposición, Castresana ha abordado las Leyes Orgánicas 5/2010 y 15/2015, de modificación del Código Penal, que han introducido respectivamente, los requisitos para atribuir la responsabilidad a las personas jurídicas y las características que debe tener el Modelo de Prevención de Delitos para exonerar a la empresa de dicha responsabilidad.
El experto ha explicado la importancia de conocer la normativa y relevancia penal para evitar que la acción de un tercero pueda influir en una empresa. “Actualmente el Estado incentiva a las empresas a dar a conocer los delitos que se están cometiendo, porque el 80% de los delitos económicos se produce en las empresas y es que ahora la empresa o la persona jurídica es la que puede tener una condena penal”, ha señalado.
Según Carlos Castresana, el compliance penal contribuye a evitar responsabilidades a los administradores en una empresa. “La ley ahora establece que los administradores tendrán que responder penalmente por no tener un control adecuado de sus empleados. Entre 2010 y 2015 la normativa no se aplicó con carácter penal. Y por eso las empresas no se tomaron tan en serio la normativa”, ha añadido.
Por su parte, Esther Rovira, ha recalcado que con la aplicación de esta normativa proporcionamos una imagen de transparencia en nuestra empresa. El programa de una empresa o persona jurídica debe ceñirse a un modelo eficaz. “No es un modelo de compliance penal copiar el de otra empresa. El modelo eficaz tiene que ser ajustado a cada empresa, a sus estructuras y personas”, ha indicado.