Adjudicadas las 20 primeras viviendas sociales reparadas por la Generalitat en el barrio de La Coma
La Generalitat ha adjudicado en menos de un mes las 20 primeras viviendas sociales reparadas dentro del plan de rehabilitación que la Conselleria que dirige María José Salvador ha puesto en marcha en La Coma en Paterna. Este plan supondrá la reparación de más de un centenar de pisos de este barrio y tendrá un coste cercano a los dos millones de euros.
En la segunda quincena de julio, diez familias de La Coma recibían las llaves de las viviendas que la Conselleria ha rehabilitado a través de la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (EIGE). En la medida que se vayan reparando más inmuebles, se irán cediendo en alquiler social a las familias que les correspondan y se espera que en las próximas semanas se adjudiquen otras 25 viviendas.
El pasado mes de junio la Conselleria de Vivienda comenzaba un Plan Director específico para La Coma que prevé la reparación de más un centenar de viviendas y una inversión histórica en el barrio de 1.936.000 euros.
Tal y como ha explicado la directora general de EIGE, Helena Beunza, con este plan, el Consell pretende «dar un paso más» y busca «aunar la rehabilitación de inmuebles con la dinamización y revitalización social del barrio». Para ello, ha recordado que una de las singularidades de este plan es la incorporación de novedosas cláusulas sociales que permiten dar empleo a parados de larga duración del barrio, ya que el 50% de las personas contratadas que realizan estas obras son vecinos desempleados de La Coma.
Por lo tanto, en esta primera fase de reparación, cinco vecinos del barrio, que han sido propuestas por el Servef, ya están trabajando y se espera que la cifra aumente a ocho.
Para Helena Beunza, la actuación en La Coma es un «ejemplo a seguir» y espera que este plan se pueda hacer extensible a otras acciones previstas en otros grupos de vivienda pública que hay en la Comunitat. A través del mismo, además de ofrecer viviendas dignas, «se atiende la problemática social del barrio mediante la creación de empleo, uno de los principales problemas de sus residentes».
En estas primeras adjudicaciones de pisos se están priorizando los cambios de viviendas de las familias que ya viven en La Coma y que tienen problemas de accesibilidad o que residen en una vivienda no adaptada a su unidad familiar. Una vez hecho el cambio, la vivienda de la que disponían estas familias se cederá a otras personas.
Otra novedad importante es que en estos contratos de alquiler los adjudicatarios han firmado un documento en el que comprometen a respetar unas normas de convivencia social en las comunidades de vecinos y la buena convivencia en el barrio.