Agricultura abre expedientes sancionadores por irregularidades en la comercialización y venta de cítricos
La Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA), dependiente del Ministerio de Agricultura, ha abierto expedientes sancionadores; tras las denuncias interpuestas la pasada campaña por LA UNIÓ de Llauradors, contra tres comercios citrícolas por presuntos incumplimientos en la existencia y contenido de contratos por parte de los mismos y contra la cadena de distribución Alcampo por cometer una infracción en la justificación de la promoción el último viernes de noviembre, conocido como Black Friday.
Tras realizar las comprobaciones oportunas a raíz de las denuncias presentadas por LA UNIÓ, la AICA considera que hay posibles incumplimientos de la Ley de medidas para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria. En este sentido, señala en diversas comunicaciones oficiales que ha ido transmitiendo a esta Organización Agraria que existen indicios razonables para abrir expedientes sancionadores a tres empresas denunciadas por LA UNIÓ y con sede social en Murcia, Puçol y la Pobla del Duc por ausencia de contenidos mínimos en los contratos o por ausencia de los mismos, así como por los plazos de los pagos a los agricultores.
Del mismo modo la AICA abre expediente sancionador a la cadena Alcampo por existir indicios razonables de haber cometido una infracción tipificada en la Ley de la Cadena Alimentaria. LA UNIÓ trasladó a la AICA el 24 de noviembre del pasado año una denuncia contra este hipermercado por los precios extremadamente bajos en la venta de naranjas y mandarinas aprovechando la campaña de Black Friday. En este caso se trataba de una oferta donde 5 kilos de naranjas tenían un precio de 1,99 euros (0,40 €/kg) y un kilo de mandarinas se ofertaba a 0,59 euros/kg.
LA UNIÓ insiste en la necesidad de que los comercios y las cadenas de distribución-supermercados actúen correctamente y reitera que a lo largo de la nueva campaña citrícola que acaba de iniciarse va a continuar velando por los intereses de los citricultores de la Comunitat Valenciana y denunciando cualquier tipo de anomalía o ilegalidad que se detecte. En este sentido, se pone a disposición de los productores de cítricos para que le trasladen cualquier incidencia que observen tanto en sus relaciones contractuales con los operadores comerciales como en las campañas de promoción que realicen las empresas de la distribución. LA UNIÓ no está en contra de las ofertas a los consumidores siempre y cuando las paguen las cadenas de distribución y no los productores con el precio que perciben. El uso de los cítricos como reclamo para que estas cadenas obtengan más beneficios en otros productos no puede ser a costa del trabajo y esfuerzo de los agricultores.
Aforo de cosecha
La Conselleria de Agricultura presentó ayer el aforo citrícola para la campaña 2017-2018, con un descenso previsto del 20% sobre la pasada campaña, lo que debería servir para que vuelvan a recuperarse los precios para el citricultor. Esta disminución productiva debe ajustarse a los volúmenes de exportación de las últimas campañas, despareciendo excedentes que sirven de excusa para bajar el precio en origen.
LA UNIÓ critica la opacidad y falta de transparencia de la Conselleria de Agricultura, tras no facilitar los datos de producción y su variación por variedades; cuestión que se criticó desde la oposición al anterior Gobierno del PP, que fue el último en no facilitar estos datos en la campaña 2014/2015, y que ahora el actual gobierno del Botànic vuelve a reeditar con el único objetivo de beneficiar a una parte del sector que dispone de una información para presionar al agricultor en la venta de su cosecha. En esta ocasión, la Conselleria de Agricultura se ha puesto de espaldas a los citricultores y entra en el juego de determinadas entidades del sector citrícola. Por tanto, desde LA UNIÓ, que siempre ha reivindicado una información al servicio del sector, se va a solicitar que la Conselleria recapacite y facilite una información que ha pagado el citricultor con sus impuestos.