Albal multa a un segundo putero con 800 euros
El día 9 de marzo, tras los ecos del feminismo sonando todavia en las calles de Albal, que acababa de celebrar el 8M más multitudinario de su historia, en un patrullaje rutinario de la Policía Local para detectar y disuadir el consumo de prostitución, los agentes sospecharon de un vehículo donde presumían que se estaba practicando sexo. Efectivamente, el consumidor y la mujer prostituida reconocieron la acción fruto de la sanción y tras los hechos el Ayuntamiento de Albal ha levantado la segunda sanción administrativa en tan solo un mes. El putero, un joven de Valencia y que conducía una furgoneta fue multado con la máxima multa que está regulada en la ordenanza municipal el pasado septiembre y que asciende a los 800 euros.
Fuentes de la investigación señalan que la Policía Judicial investiga el billete con el que pagó el prostituidor al que se le podría imputar un posible delito de falsedad de moneda.
Albal pionera en la lucha.- Tras la primera sanción a un putero el pasado mes de febrero y el eco social a raíz de la multa a un putero -un joven natural de un pueblo de l’Horta Sud-, y gracias a la aprobación de la ordenanza de la dignidad, que ha promovido el Gobierno Local que preside Ramón Marí, el alcalde se ha dirigido a Gabriela Bravo, consellera de Justicia, Gobernación y Reformas Democráticas de la Generalitat Valenciana.
En el escrito le manifiesta su apoyo en la lucha contra la prostitución y la violencia ejercida contra las mujeres, posicionándose a favor del abolicionismo. El primer edil le anuncia, como ya lo hiciera en declaraciones a los medios de comunicación, que Albal creará alojamientos para las mujeres víctimas de trata y pretende empadronarlas.
El alcalde ha felicitado al Intendente de la Policía Local Manuel Ocaña por la actuación, «no queremos esta imagen para nuestro pueblo, ni que las mujeres sufran explotación. Estamos siendo pioneros en la lucha contra la trata de mujeres y niñas y en el combate por la erradicación de la violencia de género con resultados muy lentos, pero sin desfallecer», reivindica Ramón Marí.
Más Policías, más seguridad y mayor vigilancia.- El municipio incorporó cinco agentes y consolidó el cargo de otro efectivo la semana pasada. De esta manera consolida todas las plazas de la Policía Local y cuyo número asciende a 28. «Una buena noticia para la seguridad ciudadana y que nos permite controlar más y mejor los puntos negros donde acuden los prostituidores como se ha demostrado esta semana pasada», subraya el primer edil.