Alboraia, primer municipio de l’horta, en implantar un censo de ADN canino
El registro canino es una herramienta fiable para controlar el maltrato, abandono y pérdida del perro, pudiendo localizar al responsable de estas conductas incívicas. Además, permite mantener el municipio más limpio y salubre de excrementos de perro impidiendo problemas de salud para las mascotas y los propios seres humanos por transmisión de enfermedades.
Alboraya estrena iniciativa con la implantación de un Servicio de Genotipado, Análisis, Registro y Almacenamiento de muestras para la creación del Censo Canino, y se convierte, así, en el primer municipio del área metropolitana de Valencia en desarrollar un registro de animales de estas características. Dicho proyecto se va a llevar a cabo tras la modificación de la Ordenanza municipal reguladora de la tenencia y protección de animales de compañía, publicada en el B.O.P. nº 85 de 5 de mayo de 2016.
Manuel Dueñas, concejal del Vías Públicas del Ayuntamiento de Alboraya, destaca que «se ha trabajado a conciencia en esta medida para fomentar la participación ciudadana en la defensa de los animales y garantizar la tenencia de los estos con la higiene, salud pública y seguridad conveniente». El objetivo principal de la campaña de inscripción en el censo canino, que se realizará entre los meses de septiembre y noviembre, es el disfrute y protección responsable de las mascotas, así como, garantizar la protección y convivencia entre perros y ciudadanos.
Procedimiento de inscripción
Para llevar a cabo el proceso de inscripción de las mascotas, el propietario deberá pasar por el Ayuntamiento de la localidad al objeto de retirar la autoliquidación de la tasa. Una vez abonada la tarifa correspondiente, la mascota y su responsable legal deberán acudir a uno de los centros veterinarios autorizados del municipio -marcados con una etiqueta distintiva- donde se encargarán de introducir todos los datos necesarios para el censo y se realizará una pequeña extracción de sangre al animal que determinará su identidad genética. Las muestras serán almacenadas y analizadas en un laboratorio acreditado por la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC), norma 17.025.
Transcurridos treinta días de la toma de la muestra, el propietario deberá recoger una chapa identificativa en el Ayuntamiento que el animal deberá llevar visible en todo momento. Durante los días en el que no se disponga de la placa el propietario deberá llevar el resguardo en el que se registra la huella genética de su mascota. Todo aquel can que se encuentre en el término municipal de Alboraya tendrá la obligación de circular con dicha identificación.