Benetússer, Paiporta y Catarroja reclaman «que la tarjeta de transporte gratuita esté al alcance lo antes posible de toda la ciudadanía»
En su reunión semanal con el CECOPI, las alcaldesas de Catarroja, Paiporta y Benetússer, han querido mostrar su malestar por la falta de respuesta a una de sus últimas demandas, poner a disposición de los ayuntamientos medios, espacios y personal para que la nueva tarjeta de movilidad gratuita esté al alcance lo antes posible de todos los ciudadanos.
Recientemente, la Generalitat ha abierto el proceso de solicitud esta tarjeta de transporte gratuito, Recuperem València, destinada a todos los habitantes de los 31 municipios más afectados por la riada, así como a aquellos residentes de otras localidades que hayan perdido su vehículo. Esta tarjeta permitirá a los beneficiarios viajar sin coste alguno en Metrovalencia, Cercanías, EMT, Metrobús y autobuses autonómicos hasta el 31 de diciembre de 2025.
Una iniciativa, promovida por la Generalitat para beneficiar a más de 400.000 habitantes de las zonas que más daños sufrieron por las inundaciones, que se llevará a cabo a través de las corporaciones municipales «para agilizar la gestión y facilitar que los vecinos puedan recoger sus tarjetas en sus respectivas localidades de residencia», afirman desde la Generalitat.
Pero Lorena Silvent, alcaldesa de Catarroja; Maribel Albalat, alcaldesa de Paiporta, y Eva Sanz, alcaldesa de Benetússer, denuncian que sus tres ayuntamientos siguen en una situación de emergencia y con la tramitación de las tarjetas reciben una sobrecarga de trabajo. «Para que todo el mundo reciba estas tarjetas, necesitamos medios que todavía no han llegado y queremos trasladar esta situación a la Dirección de la Emergecia, para que hagan llegar al departamento pertinente de la conselleria nuestro malestar. Todo el mundo quiere esas trajetas y las necesita, porque todos han perdido su medio transporte y si queremos impulsar los medios de transporte gratuitos se han de poner al alcance de todos», manifiestan las edilas.
No obstante, además de la falta de medios, espacios y personal para afrontar el tramite, Lorena Silvent, como portavoz de los tres ayuntamientos, ha explicado que el proceso para obtener la tarjeta «no es el más moderno y eficiente para la época que vivimos, ya que se podría hacer de forma digital para acelerar el proceso de obtención del título».
El ciudadano obtiene una tarjeta de cartón y un funcionario o funcionaria debe verificar que la persona poseedora se encuentra empadronada en el pueblo. Se rellena de forma manual el formulario y después el listado se envía a Conselleria, para que más tarde el ciudadano rebiba en casa una tarjeta en soporte de plástico.