Detenidos en Torrent por estafar 74.000 euros a 132 personas a través de Internet
València, 23 jun (EFE).- La Policía Nacional ha desarticulado en Torrent un grupo criminal dedicado a estafar a través de Internet, que operaba en toda España y que habría estafado más de 74.000 euros a 132 víctimas a través de la contratación de microcréditos mediante la usurpación de identidades.
En total, se ha detenido a nueve personas de entre 19 y 21 años -el cabecilla de los cuales ha ingresado en prisión- y otras dos han sido imputadas por estos hechos, pero no han sido arrestadas debido a que ya estaban en prisión.
Según un comunicado de la Policía, los responsables usurpaban supuestamente identidades a través de las nuevas tecnologías y falsificaban documentación para solicitar microcréditos y comprar teléfonos de alta gama en tiendas por Internet.
Para ello, aportaban una dirección ficticia a la empresa de créditos, de modo que muchas de las víctimas no eran conocedoras de que estaban inscritas en el registro de morosos por el impago del crédito, ya que no recibían notificación alguna.
Los investigadores han identificado a 132 víctimas, a las que se llegó a estafar en total 74.521 euros, para lo que crearon 56 cuentas bancarias y contrataron uno o varios créditos a nombre de estas.
El ‘modus operandi’ consistía en publicar falsas ofertas de trabajo, con las que obtenían documentación de personas para su supuesta contratación y que luego utilizaban para falsificar documentos y abrir cuentas bancarias con ese nombre y un domicilio falso, que solía estar ubicado en aldeas o pueblos pequeños de otras provincias.
Con esas documentaciones, solicitaban préstamos vía Internet y remitían las tarjetas a las direcciones facilitadas por los integrantes de la organización, que una vez recibían las cantidades de los préstamos traspasaban el dinero a otra cuenta bancaria, manejada por el cabecilla de la organización.
Asimismo, hacían compras de productos en comercios, que financiaban a doces meses, usurpando la identidad de los supuestos compradores.
La organización criminal se caracterizaba por su alta especialidad en este tipo de estafas y cada integrante tenía un papel diferenciado: los ‘conseguidores’ obtenían los datos personales de las víctimas y los ‘facilitadores’ lograban medios como cuentas bancarias. Entre ellos se repartían el dinero presuntamente estafado a través de los microcréditos.
La operación policial se suma a otra realizada en octubre de 2018, en la que se detuvo a 21 personas, que habrían estafado unos 150.000 euros a 183 víctimas, creando para ello 171 cuentas bancarias.
El inicio de las investigaciones se remonta a principios de 2018, cuando varias víctimas de distintos lugares de España denunciaron que, al solicitar un crédito o tarjeta bancaria, se les denegaba al estar inscritas en la base de datos de morosos por una deuda, algo que desconocían. EFE