El boom de las ferias que impulsa el tejido comercial
El tejido comercial del l´Horta Nord y Sud en todas sus vertientes está más que vivo. Aun así, y después de varias décadas que los ayuntamientos dedican fines de semana enteros a celebrar ferias comerciales, gastronómicas y de ocio, quedan muchas por vivir. Y es que cada vez son más las localidades que apuestan junto con sus asociaciones de comerciantes y empresariales y con el apoyo de sus respectivas concejalías por el impulso de vivir múltiples actividades en los puntos más neurálgicos de cada municipio.
Una estrategia que hace que el comercio sume, venda, se dé a conocer y se acerque, aún más, sus clientes. Una de las ferias más importantes de l´Horta Nord, que abrió el camino local fue FIMEL (la feria comercial de Meliana) que preparaba pases de modelos con ropas, peluquerías y maquillajes locales, entregas de premios, venta directa de productos y acercamiento local.
La potencia de Meliana fue en los años 90 totalmente comercial y así sirvió de ejemplo. También por l ´Horta Sud destaca la feria de Silla (una de las primeras en celebrarse) y que además conjuga el aspecto puramente comercial y el medieval (donde se mostraban antiguos oficios, forma de vida y productos de la época).
También la de Picassent, la Fira gastronómica de Puçol, la comercial de la Pobla de Farnals o la de Foios, Ben Cuit (que conjuga comercio y gastronomía con feria de la Tapa que además se ha celebrado hace unos días)
Así pues, Foios ha vivido un fin de semana de los más completos (desde juegos para los peques, talleres, catas y concurso de tapas, hasta venta local, y actividades formativas y de ocio). En palabras de Juanjo Civera, concejal de Cultura y Comercio en funciones, “llevamos 8 ediciones ya de feria y siempre es un auténtico triunfo; mezclar la gastronomía con comercio gusta mucho a la gente y siempre participa más, sale, come alguna cosa, degusta las tapas para el concurso y compra productos de comercio local”.
Para él es importantísimo que el tejido comercial esté bien atado y se den oportunidades a grandes y pequeños comercios; los que están toda una vida y los que acaban de empezar y emprender con algún sueño.
En esta edición de Foios han sido 20 los expositores y se ha podido disfrutar también de degustaciones de horchata y también se ha podido recordar y jugar con juegos tradicionales de madera. Ha habido firma de libros y exposiciones. En palabras de Civera y según relata una de las particularidades de la feria es “ver como los más pequeños se involucran y forman parte de este tejido. Nuestra feria se une con una vertiente cultural donde también hay espacio para el teatro o los espectáculos”. Además, ha explicado que “el sistema económico mueve e incentiva las compras y este año además ACOFIP, Asociación de Comerciantes de Foios cumple 25 años, es decir que el papel de las asociaciones es una de las partes más fundamentales y necesarias porque ahí, desde su corazón, se impulsa el que todos vayamos a una”.
Ahora además antes de iniciar alas fiestas locales y patronales de l’Horta Nord y Horta Sud, muchos municipios eligen junio como mes de celebración de Ferias (Quart de Poblet, Aldaia, Tavernes Blanques, o Almàssera que la celebró hace poco más de un mes). En todos y cada uno de los municipios, las ferias son el punto de reunión de amigos, de profesionales, de familias, todos con ganas de hacer feria, de hacer poble y de pasar un fin de semana disfrutando de lo que cada localidad da de sí misma sin la necesidad de coger el coche, pudiendo hacer las compras en tu municipio y aportando así al sistema económico de cada localidad.