El ocio, el gran perjudicado por la venta ilegal y consumo de alcohol y verbenas en la vía pública
Las Fallas, Patrimonio de la Humanidad, tienen sus pros y sus contras. Y, no es lógico que alabemos la fiesta y no sepamos reconocer los problemas que ella encierra. Desde FOTUR, hemos de lamentar la imagen de nuestra ciudad, que ha sido caótica. Mientras denunciamos a los músicos que tocan instrumentos en la calle, permitimos la venta y el consumo de alcohol sin control en la vía pública, e incluso a menores.
Además, parece que prime el derecho de la venta ambulante, frente a los locales que están ahí todo el año, pagando sus impuestos, creando puestos de trabajo y ofreciendo ocio legal.
Tampoco se pueden priorizar los puestos de venta de alcohol ambulante, frente a los buñuelos que forman parte de la tradición de nuestra fiesta.
La falta de control en la vía pública, es responsabilidad de todos y no podemos estar en cuestiones competenciales, entre Policía Local, Autonómica y Nacional. Durante la semana fallera, cuando la Policía Local estaba desbordada, el negocio era para los lateros, venta ambulante, mochileros, que montaban sus chiringuitos impunemente, y el botellón, que campaba a sus anchas por toda la ciudad, dejando espectáculos dantescos de suciedad en las calles.
No hablemos de la carencia de medidas higiénico-sanitarias. Queremos que la gente venga, que nos visiten turistas, que generan recursos económicos a la ciudad. Pero no ofrecemos a todas esas personas unos servicios higiénicos adecuados a la magnitud de las Fallas y su repercusión (Áreas higiénico-sanitarias y Áreas de Alimentación).
Este año, los locales de ocio han sido, una vez más, los grandes perjudicados. En lo que respecta a los pubs, han recibido la competencia del todo vale de las verbenas en la vía pública, puesto que, cuando finalizaban las verbenas, los pubs tienen que cerrar en cumplimiento de su horario, por lo que su capacidad de negocio, ha sido nula. Así las verbenas realizadas en la vía pública han sido una competencia para el sector ocupando toda su banda horaria con el cierre a las 4 de la mañana. Además, generando grandes riesgos de inseguridad por los puntos de verbenas existentes en toda la ciudad.
Creemos en la fiesta, pero en una fiesta basada en la responsabilidad y las buenas prácticas, y en la que todos los actores implicados: empresarios, falleros, administración, policías, etc. tenemos que buscar puntos de estrategia conjuntos para que nuestra fiesta siga siendo la mejor fiesta del mundo. Se trata de gestionar la fiesta como un evento de relevancia mundial, que lo es, pero hay otras formas de gestión de grandes eventos y un año más desgraciadamente estas han brillado por su ausencia.
Desde Fotur nos ofrecemos, una vez más, a aportar ideas y medidas para así, y junto con los sectores implicados, se mejore la gestión y calidad de las fiestas falleras.