La Generalitat trabaja en la revisión del Plan de Acción Territorial de carácter sectorial sobre prevención del Riesgo de Inundación en la Comunitat Valenciana (PATRICOVA) y en la modificación de la Ley de la Huerta con el objetivo de facilitar todas aquellas obras necesarias para desbloquear los proyectos de actuación sobre el encauzamiento de ríos y barrancos.

Así lo han trasladado el conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus, y el conseller de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina, durante una reunión con alcaldes y concejales de los ayuntamientos de Aldaia, Riba-roja, Loriguilla, Quart de Poblet, Xirivella, Alaquàs y Cheste.

Martínez Mus y Barrachina han mostrado a los alcaldes el compromiso de la Generalitat de ser “exigentes y colaboradores” con todas las administraciones competentes en las obras contra inundaciones. Ambos han coincidido en la necesidad de acompañar a los municipios afectados y ser reivindicativos con el Gobierno central y la Confederación Hidrográfica del Júcar para que se ejecuten las actuaciones de encauzamiento de los barrancos que son “inaplazables”.

Desde la Generalitat han indicado que se lleva trabajando meses en la modificación de la Ley de la Huerta que ahora se acelera “porque se ha demostrado que hasta ahora ha sido una norma que ha supuesto un freno a la puesta en marcha de estas actuaciones por su afección a zonas de huerta”.

El Consejo de la Huerta es un organismo autónomo de reciente creación, integrado por diversas conselleries, la Diputación de Valencia, el Ayuntamiento de València, organizaciones agrarias y entidades de defensa de la huerta. Hasta la fecha, sus informes eran preceptivos y vinculantes. Con el cambio normativo se va a eliminar cualquier traba para estas obras, han indicado.

Con las modificaciones propuestas por la Generalitat, el Consejo asumirá únicamente responsabilidades en materia agrícola. Esta reforma busca desbloquear los proyectos de actuación sobre los barrancos del Poyo y la Saleta, cuyas obras planificadas desde hace años para desviar las aguas de estas ramblas hacia el nuevo cauce del río Turia habrían mitigado los daños ocasionados por las inundaciones del pasado mes de octubre.

Actualmente, los informes sobre las mejoras en estos barrancos son desfavorables, a pesar de que los técnicos han reconocido la urgencia de estas intervenciones para evitar futuras inundaciones. Una vez aprobadas las modificaciones en la Ley de la Huerta, ambos proyectos quedarán desbloqueados, lo que obligará al Ministerio para la Transición Ecológica a ejecutar las obras.

Revisión del PATRICOVA y nueva cartografía

Durante la reunión mantenida con los alcaldes, también se ha informado de la revisión del PATRICOVA y la introducción de un nuevo paquete de medidas en materia urbanística para impulsar la reconstrucción de las localidades afectadas.

Además, la Generalitat está elaborando una nueva cartografía de las zonas inundadas, actualizando la medición del calado o profundidad del flujo de agua de los ríos Turia, Magro y Poyo.

Esta herramienta adapta la aplicación ‘Servicios de Riesgos’ utilizada por el servicio de incendios. Así, permitirá delimitar las zonas que han sufrido inundaciones y la altura de calado en cada una de ellas. Además, con esta aplicación se podrán elaborar mapas cartográficos de estas zonas inundadas y visualizar de manera clara el territorio afectado y la magnitud de las inundaciones.

En definitiva, se podrá obtener, en tiempo real, la información recogida por los técnicos desplazados a la zona de las cuencas del Turia, Magro y Poyo, que se volcará a diario en programas de Sistemas de Información Geográfica (SIG), para posteriormente crear una cartografía precisa de los eventos de inundación.