La Mancomunitat l’Horta Nord impulsa una campaña navideña para fomentar la corresponsabilidad
“No es magia, es corresponsabilidad” reivindica una distribución equitativa de las tareas domésticas y de cuidado durante la Navidad.
La Mancomunitat l’Horta Nord ha lanzado una nueva campaña de sensibilización bajo el lema “No es magia, es corresponsabilidad”. El objetivo principal es concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de asumir de manera equitativa las tareas del hogar y de cuidado, especialmente durante las fiestas navideñas, un momento en el que la carga de trabajo en el ámbito doméstico aumenta significativamente.
A través de una serie de carteles y acciones comunicativas, la iniciativa pone el foco en la necesidad de que todas las personas que forman parte de una unidad familiar se impliquen en actividades cotidianas como decorar la casa, preparar las comidas, recoger la mesa o cuidar de los más pequeños y pequeñas, así como de las personas mayores. La campaña denuncia que, tradicionalmente, estas responsabilidades han recaído de manera desproporcionada en las mujeres y busca romper con este patrón.
Según el presidente de la Mancomunitat, Fran López, “la Navidad es un tiempo para compartir, y eso debe reflejarse también en la forma en que gestionamos las tareas del hogar y las responsabilidades familiares. Con esta campaña queremos lanzar un mensaje claro: no podemos seguir relegando estas cargas a una sola persona, porque no son fruto de la magia, sino de un esfuerzo que debemos asumir entre todas y todos”.
La campaña también destaca la importancia de promover relaciones igualitarias y respetuosas en otros aspectos del día a día durante las fiestas, como la elección de regalos y juguetes, el respeto por la manera de ser de cada miembro de la familia o la necesidad de erradicar comentarios y actitudes machistas. Además, apuesta por una educación basada en la libertad de elección, alejada de los estereotipos de género.
Con esta acción, la Mancomunitat l’Horta Nord quiere dejar claro que la corresponsabilidad no solo mejora la calidad de vida de todas las personas implicadas, sino que también crea entornos más justos y equilibrados. “Las fiestas navideñas son la oportunidad perfecta para poner en práctica este cambio tan necesario en la sociedad”, concluye López.