La Pobla de Farnals plantea a la Conselleria la ampliación del colegio para aumentar las plazas de comedor
Representantes de la comunidad educativa del CEIP Cervantes de la Pobla de Farnals se han reunido con el director territorial de Educación, Santiago Estañán, para tratar posibles soluciones delante de la incapacidad del servicio de comedor del centro para dar respuesta a todas las familias de la localidad que lo solicitan.
A la sesión de trabajo, a la que han acudido el alcalde de la localidad, Enric Palanca, la concejala de Educación, Ana Borja, el director de la escuela, Amalio Herranz, y Vicent Hernàndez, miembro del Ampa, se han dibujado diferentes líneas de actuación a corto y medio plazo. La primera y de más fácil concreción sería la de habilitar un espacio accesorio al comedor, con una remodelación que facilitaría que la infraestructura aumente su capacidad para albergar a entre 30 y 40 comensales más. Las obras podrían estar terminadas en 3 meses y estarían sufragadas por el Ayuntamiento de La Pobla de Farnals y la empresa encargada del servicio del comedor.
Otra medida que se estudiará será la posibilidad de destinar un habitáculo del centro como sala multiusos, aunque poner en marcha esta iniciativa dependerá de la valoración que realice la inspección de la Conselleria de Sanidad. En este posible emplazamiento el alumnado debería comer platos precocinados a través de una empresa de catering, dada la imposibilidad de transportar la comida cocinada en el mismo centro por los patios y corredores de las instalaciones.
Además, a largo plazo se ha planteado otra opción, consistente en ampliar y reformar íntegramente la cocina para que pueda dar un mayor servicio. El Ayuntamiento se ha ofrecido a redactar el proyecto de estas obras a través de las oficinas técnicas municipales, con la supervisión de los arquitectos de la Conselleria, para acelerar el proceso.
Como medida urgente, ya ha empezado a funcionar el servicio de acompañamiento con monitores titulados desde el Cervantes hasta un establecimiento de la localidad, que ofrece un menú por 5 euros a los niños y niñas que habían quedado excluidos del servicio de comedor del centro. El Ayuntamiento ha puesto en marcha esta iniciativa, con la contratación de los monitores, para facilitar la conciliación laboral y dar respuesta a la demanda realizada por las familias que no pueden recoger a sus hijos a mediodía.