La resistencia de las mujeres
Laura García Guardado
Promotora de igualdad, feminista y coeducadora
Partidos que no nos reconocen, nos ignoran, nos invisibilizan, no pueden gobernar para las mujeres, porque para lo que no existe ni se gobierna ni se legisla.
La antidemocracia en estado puro no respeta ni reconoce que la Declaración de los Derechos Humanos también nos pertenece a las mujeres. Porque ni siquiera nos reconocen como sujetas políticas, como sujetas de derecho, no pueden tener entre sus manos la suerte de tantas vidas.
No somos un colectivo, somos el 50% de la humanidad y es ese 50% de los recursos económicos, de la tierra, de la participación en lo público y la política, lo que queremos y lo que seguiremos exigiendo, no es tanto pedir ¿no creen?
Las mujeres no olvidamos los siglos de indiferencia y violencia que han quedado marcados en nuestros cuerpos y que se han heredado generación tras generación.
Las mujeres, aún no hemos sido reconocidas al cien por cien como ciudadanas de derecho y ya quieren volver a relegarnos a lo oscuro del rincón donde no molestemos, donde no sé nos oiga.
Vienen a afianzar la cultura y educación androcéntrica, de lo masculino genérico y universal, fomentando la criptogínia, lo que ha provocado históricamente, privar a la humanidad de la genealogía feminista, del conocimiento y a ellas el reconocimiento.
Varios apuntes para quienes se (des)informan a través de las Fake news reenviadas vía WhatsApp:
• Nos llegan políticas misóginas, machistas, negacionistas del terrorismo machista que no condenan los feminicidios, por cierto, 49 niñas y niños asesinadas por quien debía protegerles, 1237 mujeres asesinadas por quien les decía “…te he de querer mientras vivas…” como decía la copla. Les acabo de dar 1286 razones para que despierten de su letanía irresponsable, por favor, luego vengan a llorar en los minutos de silencio, no me vale, no me conformo.
• Patriarcados de consentimiento, que llegan con el discurso de la libre elección, para legitimar lo ilegitimable: pornografía, prostitución, vientres de alquiler.
• Implementar el PIN parental, expulsar el aborto de la sanidad pública, derogar la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género.
• Defensa de la custodia compartida, bajo la premisa del interés superior de las y los menores, con lo que continuarán privilegiando al “Pater familias” y su poder.
• Perseguir las denuncias falsas, que obsesión de verdad, eliminación de entidades feministas “radicales” subvencionadas, lo pongo entre comillas, porque no se han enterado de que radical es ir a la raíz del problema, un poquito de cultura por favor es lo mínimo, subvencionadas dicen, cuando nos compramos hasta los bonometros de nuestro bolsillo para no dejar de acompañar a mujeres víctimas de violencia de género y machista, a sus hijas y sus hijos.
Quieren que sigamos siendo una para uno (en el matrimonio) y una para muchos (en la prostitución), seres sexuales y reproductivos. La hegemonía masculina ha llegado para quedarse, vienen a resucitar al Ángel del hogar.
Señoras y señores, vulneración de los derechos de las humanas, en estado puro.
En definitiva, así por resumir, políticas misóginas para seguir legitimando el ideal masculino.
Por las que ya no están y por las que están, les digo, que las calles son nuestros púlpitos, la palabra nuestra bandera. Tened miedo a las sin miedo. Preparadas nos encontrareis.