L’Horta contra la violencia machista
Mislata, Torrent, El Puig o Xirivella son algunas de las poblaciones de la comarca que esta mañana han guardado un minuto de silencio contra la violencia machista por una nueva víctima de la violencia de género en la Comunitat Valenciana. Con este gesto, las poblaciones de la comarca han querido condenar este último asesinato machista, que le ha costado la vida a una mujer de 78 años a manos de su marido, en una residencia de personas mayores de El Campello donde convivían.
También el President de la Generalitat, Ximo Puig, y la vicepresidenta del Consell y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, han encabezado la concentración convocada por el Consell para mostrar su repulsa por el asesinato machista de Margaret, de 79 años, en una residencia de El Campello.
En la concentración se encontraban también el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues; la directora general del Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades (IMIO), Lucía Cerón; representantes de los grupos parlamentarios de Les Corts; de la Diputación y del Ayuntamiento de Valencia y miembros de entidades civiles.
Al finalizar los tres minutos de silencio, la vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas ha indicado que «hoy la concentración es por Margaret, de 79 años, que ha sido asesinada por su pareja en El Campello dentro de esta espiral de violencia machista, de terrorismo machista que se está llevando por delante a decenas de mujeres, pero, sobre todo, es una muestra de que la sociedad está unida frente al terrorismo machista».
Oltra ha agradecido la presencia de autoridades, representantes de las diferentes administraciones, partidos políticos y sociedad civil «lo que muestra que hay una alianza inquebrantable contra la violencia machista y un compromiso firme de las relaciones igualitarias entre hombres y mujeres. Tenemos absoluta unidad con las víctimas y de estar radicalmente enfrentados a los agresores, a los que queremos lanzar un mensaje: no tenéis lugar en nuestra sociedad, no os queremos en nuestra sociedad».
A este respecto, la vicepresidenta ha señalado que, con la presencia de todas las administraciones, «estamos mostrando la predisposición a ese gran pacto de Estado que aborde la violencia de género con todos los medios y con toda la fuerza para acabar con la expresión más grosera de las desigualdades entre hombres y mujeres, que es la violencia de género».
Ponerse al lado de la víctima
Oltra ha insistido en que «hemos de recordar a todos los hombres y mujeres que viven en nuestro país que saben que detrás de las puertas de una casa, que detrás de los muros de una vivienda están ocurriendo actos de violencia de género, que han de colaborar, han de denunciar y ponerse al lado de la víctima y en contra del agresor».
Tras la concentración, se ha dado voz a los representantes institucionales y políticos que han asistido. En este sentido, la vicepresidenta ha destacado que «el Consell del Botánic es el primero que ofrece los medios de la Generalitat para que todos mostremos, con una voz y de forma unida, el rechazo al machismo y el apoyo a las víctimas».
De este modo, la directora general del Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades del Gobierno de España, Lucía Cerón, ha señalado, en su intervención, que «es un problema de todos, no solo de la persona que está sufriendo maltrato».
La diputada del Grupo Parlamentario Popular, María José Catalá, ha hecho hincapié en un «no a la violencia machista alto, claro y, sobre todo, de forma muy enérgica».
La diputada del Grupo Parlamentario Socialista, Rosa Peris, ha puesto el foco de atención en «la impunidad social de la que todavía siguen disfrutando los maltratadores» y con la que «tenemos que ir acabando». «Disfrutamos de una igualdad por decreto que no ha cuajado en una sociedad en la que todavía campa a sus anchas el machismo y el sexismo», ha asegurado.
Finalmente, el diputado del Grupo Parlamentario Compromís, Enric Bataller, ha manifestado su repulsa por este hecho. «Nos gustaría que esta fuera la última víctima, pero, por desgracia, queda mucho por hacer. No podemos amparar, comprender o incluso consentir estas actitudes porque no tienen ninguna justificación. Hemos de estar todos juntos contra la violencia de género».