Los Socialistas de Sedaví denuncian el cierre del parque de la calle Valencia por plaga de procesionaria
El Ayuntamiento de Sedaví se ha visto obligado a clausurar hace unos días el parque situado en la calle Valencia porque sufre una plaga de procesionaria y algunos usuarios de esta zona verde se han visto afectados por urticarias y similares. Las quejas empezaron a llegar hace semanas, cuando se dieron los primeros casos, pero no ha sido hasta hace unos días cuando el ayuntamiento se ha decidido a tomar medidas. Así lo han denunciado fuentes socialistas a través de un comunicado.
La situación que se vive en la calle Valencia no es casual sino que está directamente relacionada con la política de recortes sin sentido y mala gestión que caracteriza al gobierno local del PP y al alcalde Rafael Pérez. Para empezar y como desde el grupo municipal socialista llevamos mucho tiempo denunciando, el alcalde despidió hace dos años a uno de los jardineros de la plantilla municipal y amortizó la plaza, añadido que desde hace 4 años esta vacante la plaza de técnico de medio ambiente que antes ha sido eliminada de la plantilla de personal que ha sido cubierta, con lo que el departamento ha quedado con menos recursos para atender las zonas verdes.
Y además, hace un mes que finalizó el convenio con el Instituto Valenciano de Atención a los Discapacitados (Ivadis), que se encarga de la jardinería pública, y tampoco se ha renovado hasta la fecha, lo que pone de manifiesto una gestión a salto de mata e improvisación Por lo tanto, no es de extrañar que esta falta de recursos haya provocado que no se detectara a tiempo esta plaga de procesionaria ni se actuara y al final se ha tenido que llegar a cerrar un parque.
Hay que recordar que la procesionaria es un hongo que ataca a los pinos y que cuando se prolifera en exceso se convierte en plaga, con la que, si no se actúa a tiempo, puede tener consecuencias graves para el arbolado. Los socialistas ya sabemos que este asunto preocupa muy poco al alcalde, que nos tiene acostumbrados a talar árboles en la población a la primera de cambio. Pero es que, además, la procesionaria puede tener graves afecciones sobre la población, en forma de urticaria o problemas de alergias y dificultades respiratorias, y también afecta a los animales de compañía.
Desde el grupo municipal socialista reclamamos al alcalde que actúe con rapidez en este asunto e incluso que busque asesoramiento de municipios más avanzados en materia de jardines, de arbolado o de Medio Ambiente.