Mapa de contagios a fecha 30/3/20

Madrid, 30 mar (EFE).- El Ministerio de Sanidad ha confirmado este lunes un total de 85.195 casos positivos de coronavirus, 6.398 más que hace veinticuatro horas, lo que supone un incremento del 8,1 por ciento, y 7.340 fallecidos, 812 más, un ascenso del 12,4 por ciento, unos datos que muestran un cambio de tendencia, según este departamento.

Además, 5.231 pacientes están ingresados en la UCI, 324 más en 24 horas, y 2.071 personas más ya se han recuperado del COVID-19, con lo que el número total asciende a 16.780, el 20 % de todos los casos notificados, según los últimos datos facilitados por el departamento que dirige Salvador Illa.

Con estos datos, España a supera a China en contagios, ya que, según las últimas cifras conocidas, el país asiático, origen del coronavirus, tiene 82.341 casos.

Existe un cambio de tendencia en el incremento medio de casos diarios, según ha informado en rueda de prensa la doctora María José Sierra, jefa de área del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, que ha sustituido a Fernando Simón tras dar éste positivo por coronavirus y permanecer en aislamiento domiciliario.

Así, del 15 al 25 de marzo ese ascenso medio era del 20 % y desde ese día es del 12 %, ha precisado Serra, que ha pedido tomar estos datos con cautela, aunque «era lo esperado».

Sierra ha reconocido que «lo que más preocupa» ahora a Sanidad es la presión sobre las UCI que, «va a ser importante» en las próximas semanas.

«Si conseguimos rebajar la presión va a ser muy importante para las medidas de desescalado, que ya hay que pensar en ellas», ha subrayado.

Este domingo, el doctor Simón advirtió de que hay riesgo de saturación en UCI de 6 comunidades autónomas y otras tres se están acercando a esa situación.

La doctora Sierra ha agradecido a todos los ciudadanos que permanecen en sus casas, porque «no es fácil para muchos de ellos».

Este lunes los españoles encaran la tercera semana de confinamiento en un día en que los trabajadores de actividades económicas no esenciales dejan de trabajar hasta el 9 de abril con el fin de reducir aún más la movilidad y el riesgo de infecciones, y tratar de evitar el colapso en las UCI cuando llegue el pico de contagios.

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