“Paterna reduciría hasta un 80% las heces de perro en sus calles con un censo genético”
Los vecinos de Paterna han recuperado el debate sobre la necesidad de implantar un servicio de identificación de los perros del municipio a partir del ADN canino. Así, sus más de 7.000 canes contarían con un historial genético para facilitar, entre otras propiedades, la identificación del propietario que no recoja las heces que deja su mascota en la calle.
En este sentido, el primer laboratorio en España que presta un servicio integral de identificación genético-canina a municipios, ha anunciado hoy que si Paterna da el paso de implantar este censo, “reduciría hasta un 80% las heces de perro en sus calles”. Una estimación que el CEO de ADN Canino, Enrique Perigüell, argumenta a partir de la experiencia de esta empresa en otros municipios españoles como Málaga o Meco (Madrid) y valencianos, como Cárcer o Xàtiva, “donde hemos alcanzado una reducción en torno a ese porcentaje gracias al carácter disuasorio que para los propietarios de mascotas significa poder ser identificados si incumplen la normativa municipal”.
A partir de su experiencia en la prestación de este servicio de identificación genética, Perigüell indica que “más que afán sancionador, el censo consigue que los vecinos con perro tomen conciencia de que por salud pública es beneficioso para todas y todos que recojan los excrementos de sus mascotas”. Además, “evitan hacer frente a multas que suelen oscilar entre los 30 y 600€ y consiguen que las calles ganen en limpieza y salubridad”.
Censo genético y microchip
El ADN canino es una medida complementaria al actual microchip con la que los colegios de veterinarios registran en cada comunidad autónoma la población de perros. Con todo, “el microchip se puede extraer, se puede manipular o se puede olvidar eliminarlo cuando el can fallece, por lo que la información que contiene plantea sesgos que impiden ser eficaces en el control de epidemias, censo y otras actuaciones como las preventivas o las sancionadoras para casos de abandono o maltrato”, señala. De ahí la idoneidad de complementar la información que contiene con la de la identificación genética de los perros.
Protocolo de implantación y funcionamiento del ADN canino
Cuando un municipio como Paterna implanta el servicio de identificación genética, lo primero que realiza es recoger muestras de saliva de los perros, “una práctica rápida e indolora para el animal”, matiza el especialista. La muestra se lleva a un laboratorio especializado, que a los 10 días obtiene la información genética del animal y “conserva en el censo para cuando las autoridades locales tengan que identificar al infractor que olvide las heces en la calle, al maltratador de un animal o a quien lo abandone”, subraya.
Heces en la calle: un problema de salud pública
Las heces de las mascotas en la vía pública “significan un problema de salud pública en sí mismo para los vecinos de las poblaciones que, como el caso de Paterna, sufren la presencia de las deposiciones animales”.
Precisamente, la veterinaria María del Rosario Montaner Signes, afirma que “reducir la presencia de excrementos en la calle es reducir también el riesgo de contagios de enfermedades por zoonosis, patologías intestinales como diarreas agudas provocadas por el contacto de humanos con excrementos infectados de perros”.
El registro del ADN canino en España
ADN Canino es la empresa valenciana que, en colaboración con colegios de veterinarios, ha implantado en España un sistema pionero de censo de mascotas a partir de su secuencia genética. Precisamente, el registro del ADN de los perros ya es una realidad en numerosos municipios españoles. Así, los más de 5 millones de perros que hay en España tendrían garantizado un seguimiento más real, más eficaz y más actualizado que el que pueden ofrecer los chips con el que actualmente se controla su población.