¿Por qué el día de la Dana algunos Ayuntamientos suspendieron clases y cerraron instalaciones, y otros no?
No existe un protocolo de actuación conjunto sobre qué hacer ante episodios de lluvia o de viento, cada Ayuntamiento decide cuando no hay colegio o cuando cierra sus instalaciones municipales (polideportivos, parques, oficinas, etc)
Antes de la Dana, y ante inclemencias meteorológicas, ha sido habitual ver como municipios cancelaban sus clases y otros no lo hacían. Las comunicaciones sobre la cancelación de clases para el día siguiente llegaban a última hora del día por redes sociales anunciando la decisión. Algo que siempre ha sido muy cuestionado por las AMPAS y padres y madres de los escolares por la falta de premura para avisar y lo complicado que resulta para la conciliación avisar con tan pocas horas de antelación.
Es por eso que antes del 29 de octubre, día de la Dana, ante episodios de viento o lluvia, se producía la paradoja que, municipios vecinos y separados por una calle, unos tenían colegio y otros no e incluso suspendían las extraescolares.
¿De quien depende esa decisión? Del Ayuntamiento. Los alcaldes y alcaldesas toman esas decisiones informados por sus funcionarios municipales y Policía Local. Sin embargo, no existe un protocolo estándar y no tienen directrices directas de los departamentos de emergencias, organismos superiores a los Ayuntamientos que cuentan con técnicos especialistas en la materia.
Tras la Dana, los Ayuntamientos reclaman directrices claras sobre qué hacer, y hacerlo todos los municipios de forma unánime.
Las alcaldesas Lorena Silvent (Catarroja), Maribel Albalat (Paiporta) y Eva Sanz (Benetússer) reclamaron ayer en la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI) que se trabaje un protocolo común dirigido a los ayuntamientos que estandarice la gestión municipal en la toma de decisiones ante las alertas meteorológicas. Una petición que no vino únicamente de los tres municipios sino que hubo más alcaldes y alcaldesas que también la solicitaron al comprobar como tras las alertas por viento de los últimos días se ha visto respuestas municipales diferentes ante situaciones de alerta idénticas.
Los tres municipios coinciden en que los técnicos de Emergencias presentes en el CECOPI son «expertos en emergencias y por ello las personas adecuadas para la realización de este protocolo». Sanz, Silvent y Albalat remarcan que no se puede «descargar la responsabilidad de la toma de decisiones ante una alerta en los ayuntamientos si estos no disponen de toda la información» por ese motivo creen necesaria la elaboración de «un protocolo de actuación muncipal común para todos que luego cada municipio pueda adaptar a sus particularidades».
Más reclamaciones
Paiporta, Benetússer y Catarroja insistieron también en la reunión de ayer en la necesidad de presionar a la patronal de los ascensores para que las empresas mantenedoras de los mismos reaccionen y solucionen los problemas en las comunidades de propietarios/as. «Tres meses después de la tragedia sigue habiendo muchos ascensores de eficios que no funcionan complicando a personas con movilidad reducida poder realizar una vida normal. Necesitamos que a las empresas mantenedoras de ascensores se les obligue a actuar», aclaran. La dirección de la emergencia respondió al respecto que se están realizando gestiones en esa línea.
Por último, los tres municipios también insistieron en la necesidad de un plan a medio y largo plazo para la revisión estructural de los edificios afectados por la DANA que en muchos casos han tenido aguas estancadas en sus garajes durante semanas o meses. En este sentido, la dirección de la emergencia respondió que se está trabajado sobre el tema junto con la conselleria competente y que en breve podría cristalizar una propuesta de plan.