Quart de Poblet continúa su transformación hacia un modelo de ciudad 100% sostenible y ecológica
Quart de Poblet mantiene su imparable metamorfosis para asentarse como una ciudad pionera en materia de sostenibilidad y tecnología, con un diseño urbanístico que se articule en torno a las necesidades de las vecinas y vecinos. Con más de la mitad de los trabajos finalizados, el Proyecto de Adecuación Urbanística (PAI) Molí d’Animeta es un claro ejemplo de esta apuesta del Consistorio por desarrollar políticas que potencien el cuidado medioambiental y se centren en construir espacios pensados para las personas.
Con el objetivo de conocer el avance de las obras, la alcaldesa Carmen Martínez, acompañada por el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Juan Medina, y personal técnico municipal, visitó la futura urbanización el pasado 22 de octubre. Durante el recorrido, Martínez se interesó especialmente por los aspectos medioambientales y pudo constatar que el trabajo avanza adecuadamente, cumpliendo los plazos y los objetivos marcados.
Este PAI de 269.218’82 metros cuadrados aportará a Quart de Poblet nuevos accesos, servicios urbanos, jardines, huertos, a la vez que restaurará la red de acequias de la zona, basándose en un modelo de construcción «verde». Para ello, cuenta con proveedores locales, de manera que no solo se minimiza al máximo el transporte y su consiguiente contaminación, sino que también se potencia la economía circular. Además se ha reducido el uso de material de cantera, apostando por la reutilización de materiales procedentes de la obra, de demoliciones y de excavaciones.
La movilidad sostenible también juega un papel central en este proyecto. Con el objetivo de impulsar y facilitar el uso de medios de transporte alternativos y saludables, está proyectada una amplia red de carriles bici, así como dos aparcamientos disuasorios para fomentar el uso del metro. De igual manera, se instalarán diversos puntos de recarga eléctricos para vehículos en la vía pública.
Paralelamente, con el propósito de reducir la contaminación, se empleará asfalto fonoabsorbente, con el que se mitiga la contaminación acústica generada por el tráfico, y la iluminaria contará con tecnología LED, programable con hasta cinco escalones de potencia, asegurando así un mayor ahorro energético. Además, para el diseño del mobiliario urbano se emplean materiales reciclados o reciclables.
También se están instalando sistemas urbanos de drenaje sostenibles (SUDS) que permiten reducir la escorrentía (agua de lluvia) y conseguir un vertido de calidad. Así, se creará un jardín de lluvia, una zona verde diseñada como estructura de captación, filtrado y laminación, con pozos de rebose por los que el exceso de agua entra a la red de drenaje; y un jardín de infiltración-laminación, otro espacio verde en la zona del BIC que recibe la escorrentía del ámbito, facilitando la filtración a la vez que permite la laminación del sistema, disminuyendo así el volumen y el caudal del agua. Por último, las zonas de aparcamiento también contarán con este sistema, con adoquines permeables que permiten la captación, filtrado y laminación.
Además, los vecinos y vecinas podrán disfrutar de más de 100.000 metros cuadrados de zona verdes a lo largo de este nuevo espacio, destacando el parque de huerta y el parque lineal; así como de nuevos equipamientos deportivos. Otro atractivo será la puesta en valor de la acequia, y de los recorridos biosaludables con los que se quiere fomentar el conocimiento y disfrute del patrimonio hidráulico del municipio y del entorno, considerado Bien de Interés Cultural (BIC).
Se trata de un ambicioso proyecto que marca claramente el futuro de Quart de Poblet, un municipio que siempre ha destacado por posicionarse a la vanguardia en cuestiones medioambientales y de innovación, impulsando y cuidando de su patrimonio, para construir un espacio en el que los quarteros y quarteras puedan habitar con la mejor calidad de vida posible.