Últimas actualizaciones del formulario ESTA y los viajes entre España y EE. UU.
El coronavirus ha cambiado la forma en la que se viajaba por el mundo. La pandemia, además, está modificando la forma de relacionarse socialmente con cualquier persona de otro país y continente. La actual situación social también está afectando a los trabajos y a las economías de todos los sectores, pero especialmente a aquellos relacionados con los viajes. El turismo es uno de los ámbitos económicos más afectados. Viajar, en estos momentos, no siempre es posible. Hay países que, directamente, tienen cerradas sus fronteras y otros exigen unos días de cuarentana a sus turistas, que, ya de por sí, suelen ser escasos a nivel mundial. Si hablamos de Estados Unidos, además de revisar la normativa sobre la procedencia de cada país, es necesario que todo turista esté en posesión de un ESTA. Y este no es un trámite nuevo. Ya existía antes de la pandemia.
Veamos sus principales características. La ESTA es un permiso de viaje obligatorio para viajar a Estados Unidos y que deben cursar todas aquellas personas que no tengan un visado de residencia en este país de Norteamérica. Su tramitación es sencilla y rápida, y con un coste bastante asumible (unos 30 euros por persona); realizándose su gestión a través de un simple formulario. Hoy en día, a pesar de la situación de la pandemia, se pueden solicitar tramitar solicitud ESTA. Y una vez cursada esta petición, desde las respectivas embajadas de los Estados Unidos, como pueda ser la ubicada en España, se siguen aprobando. La validez de la ESTA, una vez aprobada, tiene una validez de dos años, y siempre y cuando se cumplan con las normas de aceptación de este documento, puesto que la ESTA puede ser revocada o aplazada en cualquier momento de este plazo por parte de las autoridades estadounidenses.
Hay que aclarar que estar en posesión de una ESTA no significa que podamos viajar de manera libremente a los Estados Unidos. Actualmente, desde este país hay impuestas una serie de restricciones en función de nuestro país de origen, y todo debido a la situación de la pandemia. Asimismo, están las excepciones, como son aquellas personas que trabajan en alguna empresa asentada en los Estados Unidos, o estudiantes y personas que tengan que viajar y acceder al país por temas de negocios. En estos casos, hay que hacer un trámite adicional al ESTA, y cursarlo con la embajada o el consulado. Y esperar el visto bueno, algo que depende del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos. Pero estos son casos especiales.
ESTA: no se devuelve el dinero
Otro aspecto a considerar, especialmente en aquellas personas que tuvieron que aplazar sus viajes de vacaciones a los Estados Unidos, está en que no podrá recuperar el dinero gastado en su ESTA, aunque se diese el caso de no poder hacerla efectiva en los dos años de su validez. Quizá, en estos casos, deba consultar con su agencia de viajes o con su seguro de cancelación, aunque los expertos consideran que es un dinero que no se va a recuperar. Muchos seguros invocan la cláusula de ‘fuerza mayor’, con lo que esta circunstancia no estaría contemplada en la reclamación. La solución será volver a cursar el trámite de la ESTA.