Varios familiares de víctimas del incendio de Campanar piden imputar al jefe de bomberos

Familiares de las víctimas del incendio del edificio del barrio de Campanar del pasado 22 de febrero han pedido al juzgado que instruye el caso que cite al jefe de Bomberos de València como investigado al considerar que, en su primera declaración, «mintió» y «ocultó» información que le pudiera comprometer a él o al cuerpo que dirige.

El abogado que les representa, en un escrito remitido al juzgado de instrucción número 9 de València al que ha tenido acceso EFE, pide que el jefe de los bomberos, Enrique Chisbert, vuelva a comparecer ante el juzgado para responder sobre su participación en los hechos como «presunto autor de un delito de imprudencia grave», con resultado de diez muertos.

Según el letrado, el jefe de bomberos «ocultó» en su primera declaración, a preguntas de juez y del fiscal, que la primera escalera mecánica de bomberos que acudió al edificio y pudo apagar el incendio de la vivienda 86 y con esto la propagación del incendio no funcionó, debiéndose esperar a que llegara otra, lo que resultó ya tarde.

Con ello, indica, «minimizó hasta llegar a resultar un insulto a la inteligencia las consecuencias de dicho fallo» y cuestiona que este hecho «tan grave», que no ha sido investigado, no lo manifestara hasta que fue expresamente interrogado por la acusación particular.

El letrado cuestiona asimismo que tampoco se ofreciera ninguna explicación «convincente» de por qué no se grabaron las comunicaciones internas entre bomberos, cuando existe esa posibilidad técnica.

Considera además que estaba «especialmente preparado e instruido» para su declaración y «mintió», ya que realizó «afirmaciones que son rotundamente falsas, como que la escalera interna del edificio colapsó a las 18:20 y fue impracticable desde dicho momento, lo que es palmariamente falso, pues fue por donde los propios bomberos atrapados en un primer momento salieron y el resto de intervenciones», según unos vídeos de la propia escalera tras el incendio.

Pide también que se citen como testigos a los dos bomberos que acudieron después de las 18:30 y realizaron labores de rescate hasta el final, por lo que transitaron por dichas escaleras, «lo que evidencia que nunca colapsaron, siendo practicable para el uso por bomberos y posible evacuación de personas confinadas».

Insiste además en que se aporten las llamadas que ese día se hicieron al servicio de Emergencias 112.

El abogado considera también «falsas» las declaraciones del jefe de Bomberos en sede judicial al manifestar que indicaron a los vecinos que salieran del edificio y contradice su propia declaración ante los medios de comunicación.

El abogado pide que el jefe de bomberos responda a si abrió una investigación interna o una mera investigación para mejoras futuras, como así indicó en su declaración, y por qué, nueve meses después del incendio, no finalizó dicha investigación, ni sus conclusiones las remitió a nadie, «actuación que puede reflejar claramente su voluntad de encubrir las imprudencias ya detectadas».

A su juicio, tiene que explicar si, ante la gravedad del incendio, «asumió el mando del operativo de extinción desde el primer momento que fue informado del mismo, aunque lo fuera telefónicamente, o si no lo asumió, y por qué tardó más de dos horas en llegar al lugar de los hechos según manifestó en su declaración».

También sobre por qué, tras recibir cursos sobre el incendio de Grenfell, no ordenó la inspección de edificios con dichos revestimientos, y no formó a sus bomberos para corregir la política de «no moverse».

O por qué «se ordenó a Ramón y a Marta, que estaban junto a sus dos bebés, introducirse en el baño y poner paños de agua por debajo de las puertas cuando el agua estaba cortada»; por qué «no hubo seguimiento de los vecinos atrapados por las diferentes intervenciones de bomberos» y por qué permitió que el sargento de la primera intervención, que debía estar vigilando desde el exterior la evolución del incendio, se introdujese en el interior.

«No practicarse su comparecencia en su calidad de investigado sería tanto como otorgar carta de naturaleza a la impunidad de quien legalmente tiene la consideración de garante para la vida y salud de los ciudadanos de Valencia», concluye el letrado. EFE