Verano repleto de actividades para los usuarios del Centro de Día y Residencia de tipología mixta de Quart de Poblet
Las personas usuarias del Centro de Día y Residencia de tipología mixta de Quart de Poblet están viviendo un verano repleto de actividades.
Alimentar polluelos de Vencejo para que crezcan fuertes y sanos fue la actividad encargada de abrir paso a la programación estival. Durante las tres primeras semanas de julio, las personas residentes se convirtieron en monitoras y monitores para realizar juegos deportivos en la escuela de verano de Sant Onofre. De igual forma, se convirtieron en locutores de radio con la grabación de un podcast en el Espai de Creació Jove. Otra de las actividades que disfrutaron muchísimo fue la tradicional fiesta de San Fermín en la que hubo horchata, limón granizado, fartons y un encierro un tanto peculiar.
Valencia cuenta con una rica oferta cultural. Por ello, las personas residentes realizaron una excursión al Museo Valenciano de la Ilustración y la Modernidad (MUVIM). Y de ahí se trasladaron a la isla para celebrar en la residencia la mítica fiesta ibicenca donde el blanco fue el color protagonista.
Como novedad, y para hacer más llevadero este mes tan caluroso, optaron por preparar una horchata bien fresquita en la residencia, dejando de lado las típicas salidas gastronómicas en las terrazas. Asimismo, aprovecharon las buenas temperaturas para realizar una escapada a la playa y a la piscina donde se bañaron y también hicieron un poco de pilates junto con la gente de Cruz Roja.
Además de estas actividades veraniegas, las personas residentes realizaron también las actividades habituales de todo el año como talleres de expresión artística y de cocina, salidas semanales, torneo de Boccia, celebración de cumpleaños y proyección de cortometrajes.
El centro de tipología Mixta de Quart de Poblet ha recibido varios galardones desde que abrió sus puertas hace cinco años. Entre ellos, la Fundación Pilares otorgó al cocinero del Centro, David Vijuescas, el premio al mejor relato en primera persona a raíz de su experiencia durante la Covid-19. Un relato donde se pone en valor a todos los miembros y equipo de profesionales de la residencia, sin distinción de categorías. Cada día durante toda la pandemia escribía en un diario algún hecho bonito o característica agradable de un residente o trabajador. A ese diario del Centro mixto de Quart de Poblet lo tituló El Castillo.
Este premio se suma a otros que reconocen este proyecto como uno de los mejores de España. Hay que recordar que este centro de tipología mixta con residencia para personas mayores, residencia para personas con diversidad funcional menores de 65 años y centro de día es uno de los pocos existentes en la Comunidad Valenciana.