La Diputación de Valencia y los equipos de gobierno de Alboraya y Tavernes Blanques visitan el nuevo paso de viandantes que une ambas localidades
Esta mañana el vicepresidente segundo de la Diputación y Diputado de Infraestructuras, Rafa García, ha visitado junto a Miguel Chavarría, alcalde de Alboraya, y Carmen Marco Aguilar, alcaldesa de Tavernes Blanques, el tramo construido que une ambos municipios. Parte de los equipos de gobierno de ambos consistorios también han asistido a la visita para conocer de primera mano el estado de las obras realizadas.
La carretera CV-311 que une Alboraya y Tavernes Blanques ya cuenta con un nuevo paso para peatones que conecta ambos núcleos urbanos. Las obras empezaron el pasado 10 de enero y se ha incorporado una acera e iluminación en el lado de la gasolinera.
La actuación se produce después de que la ciudad de Valencia aceptara el proyecto de urbanización de la acera, ya que ni Alboraya ni Tavernes Blanques poseen competencias para actuar en la zona abordada. Para ello, el alcalde de Alboraya, Miguel Chavarría, y la alcaldesa de Tavernes Blanques, Mari Carmen Marco, solicitaron en varias ocasiones la licitación de la obra «para mejorar la seguridad de nuestros vecinos y vecinas y evitar que tengan que moverse entre ambos términos municipales por la carretera, con el peligro que ello conlleva», tal y como explica el primer edil de Alboraya.
El Diputado de Infraestructuras ha destacado tras la visita a la obra, que «se trata de una reivindicación histórica de los Ayuntamientos de Alboraia y Tavernes Blanques que por fin hemos convertido en realidad. Una inversión que mejora la conexión entre dos municipios y ante todo la seguridad vial». Rafa García, ha puesto en valor «la importancia de la colaboración institucional que ha permitido con la actuación desarrollada desde Diputación mejorar la cohesión territorial y la calidad de vida de los dos municipios».
Tanto Chavarría como Marco ya han anunciado que continuarán solicitando, reclamando y proponiendo mejoras de conexión entre los pueblos vecinos tras esta actuación de carácter urgente, como, por ejemplo, la posible construcción de un carril bici que, de nuevo, deberá de ser aceptado por la ciudad de Valencia.