Un estudio revela que la chufa de Alboraia y València es buena también para la vista
Esta mañana se han presentado los resultados del estudio «Suplementación nutricional con Chufa de Valencia para la mejora de la función visual» llevado a cabo por la Unidad de Investigación Oftalmológica «Santiago Grisolía» y la Fundación para la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Generalitat Valenciana (FISABIO).
Los investigadores responsables del proyecto, Mª Dolores Pinazo y Vicente Zanón, han expuesto la metodología del estudio y sus conclusiones, resaltando que es el primer estudio en todo el mundo que demuestra el beneficio de ingerir diariamente una pequeña cantidad de chufa, para mantener la densidad óptica del pigmento macular (DOPM) y para ayudar a controlar la dislipemia y el estrés oxidativo.
A la cita acudió el alcalde de Alboraya, Miguel Chavarría, acompañado por miembros de la corporación municipal. El primer edil del ayuntamiento dedicó unas palabras a la importancia de promover el producto autóctono de la localidad a través de ventajas como la mejora en la función visual recientemente demostrada.
El objetivo general era evaluar el efecto del consumo de chufa de Valencia, como fuente de proteínas vegetales, fibra, vitamina E, carotenoides y ácidos grasos omega-6, sobre la densidad óptica del pigmento macular (DOPM) y la actividad antioxidante plasmática (AAP) para establecer sus propiedades como alimento alternativo para la salud visual. El estudiio se hizo sobre una muestra de 30 participantes que tomaron diariamente 30 g. de chufa no elaborada durante 3 meses.
A los 3 meses tras la ingesta diaria de chufa de Valencia, tal y como han explicado los responsables del estudio, se observó un aumento medio del 50% en el volumen de pigmento macular en ambos ojos. Para los investigadores, esto nos demuestra que el tubérculo posee carotenoides (luteína y zeaxantina) que pueden almacenarse en la región macular, favoreciendo las funciones que allí desempeñan esos pigmentos como filtro de la luz ultravioleta para proteger la mácula. Por otra parte, conociendo la composición de la chufa, rica en ácidos grasos poliinsaturados y, puesto que ellos favorecen los depósitos de luteína y zeaxantina a nivel macular, no es extraño que hayan provocado la mejoría de los resultados de la densidad óptica del pigmento macular.
Otra de las funciones de los carotenoides componentes del pigmento macular es precisamente su acción antioxidante. Los investigadores han comprobado que la suplementación con chufa de Valencia ha aumentado significativamente la actividad antioxidante plasmática lo que, además, favorece también la protección de la retina frente al estrés oxidativo exógeno provocado por los agentes medioambientales (radiaciones, humo del tabaco, polución, etc) o el estrés oxidativo endógeno (resultado de las reacciones químicas que tienen lugar en nuestro organismo).
Pero no sólo se ha visto beneficiada la función visual, ya que como ha explicado el Dr. Zanón, el consumo de chufa disminuyó el colesterol total (5%), especialmente la fracción LDL (colesterol malo) (9%) y los triglicéridos (10%), mientras que la fracción del colesterol HDL (bueno) aumentó un 7%. También los niveles de glucosa tendían a disminuir levemente tras la ingesta de la chufa durante 3 meses consecutivos (6%) y se aumentó ligeramente la concentración de calcio.
La Dra. Pinazo ha manifestado su interés en continuar esta línea de investigación pero esta vez con pacientes oftalmológicos (glaucoma, ojo seco, degeneración macular, retinopatía diabética) porque, tal y como ha explicado, deben esperarse resultados mucho más específicos y espectaculares en cuanto a los beneficios de la ingesta de chufa de Valencia sobre estas enfermedades oculares.
En conclusión, la chufa aporta proteínas vegetales, vitaminas antioxidantes, ácidos grasos poliinsaturados y carotenoides que deben considerarse para favorecer la salud en general de la población y de forma específica es beneficiosa para la integridad macular.
El presidente de la D.O. Chufa de Valencia, Antonio Gimeno, ha manifestado su intención de seguir apoyando los estudios e investigaciones que ponen en valor la chufa de Valencia y demuestran científicamente las numerosas propiedades saludables de este tubérculo.
La Unidad de Investigación Oftalmológica «Santiago Grisolía» fue fundada en 2001 por la Dra. M Dolores Pinazo Durán, Oftalmólogo e investigador del Dept de Salud Valencia-Hospital Univ Dr Peset, bajo el auspicio de la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados (Profesor Santiago Grisolía), y de la Generalitat Valenciana (Dr. Alfonso Bataller).